Escrito por: Hermínia Gomà
La Resiliencia es un vocablo que deriva del latín resilio que significa volver atrás o rebotar. En física se dice de la capacidad de los materiales de volver a su forma original después de haber sido forzados a cambiar o deformarse. En psicología, la resiliencia o afrontamiento, se refiere a la capacidad de las personas, familias, equipos u organizaciones para recobrarse en situaciones críticas, sobreponerse y tomar el poder sobre la situación, en lugar de evadirse, huir o bloquearse. Se define también como aquella capacidad para proyectarnos proactivamente en el futuro con independencia de las dificultades que aparezcan.
Cuando afrontamos la vida como una escuela, cada situación adversa se convierte en una lección, cada adversario en nuestro maestro de vida. Para mí, hay una metáfora que describe claramente esta competencia: “el ave fénix que resurge de las cenizas”. La resiliencia sería el ave fénix que todos llevamos dentro y que nos capacita para transformarnos y crecernos ante las dificultades de manera genuina. La resiliencia nos permite reinventarnos, abrir ventanas cuando se cierran algunas puertas, estudiar para aprender una nueva profesión cuando hemos finalizado un ciclo laboral, atrevernos a realizar aquel sueño que hemos ido postergando a lo largo del tiempo, liberarnos de los lastres del pasado e incluso dejar de sobrevivir para atrevernos a vivir.
Todas las personas disponemos de un enorme potencial (a veces insospechado) para superarnos ante las adversidades. Dependerá de cada uno de nosotros que lo descubramos y utilicemos cuando la vida nos sorprenda desfavorablemente de manera imprevista. Una de las competencias clave para el liderazgo es la resiliencia, es decir, la capacidad de aceptar, responder y superar situaciones imprevisibles de manera satisfactoria. Cuando el líder es resiliente percibe el cambio o la adversidad como un desafío que fortalecerá sus competencias tanto interpersonales como intrapersonales. Si lideramos un equipo desde la resiliencia significa que nos preparamos para afrontar los desafíos, implementar estrategias que generen un clima de colaboración ante la adversidad, abrir nuestras mentes ante lo desconocido, crear una visión más profunda y con mayor perspectiva y conectar con la creatividad y los talentos individuales para poder realizar un verdadero trabajo de equipo.
Desde el Coaching Teleológico entrenamos la resiliencia de líderes y equipos acompañándoles para que aprendan a encontrar nuevas alternativas ¿Cómo? Promoviendo en el núcleo de las organizaciones valores como la confianza, la colaboración, la creatividad y el espíritu de superación y creando las condiciones necesarias para desarrollar su resiliencia. Desde el Coaching Teleológico ponemos en el epicentro del proceso la pregunta ¿PARA QUÉ? Con esta pregunta nos centramos en el sentido y el propósito que inspira a nuestros clientes para que se dirijan hacia el futuro, en lugar de lamentarse en las causas de algo que es imposible de cambiar porque pertenece al pasado, a su área de preocupación.
El para qué coloca a las personas en su área de influencia,
lo que les permitirá pasar a la acción de manera conciente y responsable
La resiliencia también es una competencia clave para el desarrollo de un profesional del Coaching Teleológico. Cada cliente es un reto y cada situación que nos presentan un desafío. Si esta competencia no la hemos desarrollado personalmente ¿Cómo podremos ayudar a nuestros clientes? ¿Cómo acompañarles en la toma de decisiones desde la incertidumbre? Por tanto, antes de ayudar a desarrollar esta competencia en nuestros coachees será imprescindible haberla desarrollado en nosotros mismos. La pregunta que me surge de manera natural es:
¿Cómo respondo a los sucesos que me impactan fuertemente,
que no puedo predecir y que me sorprenden?
Para ayudarnos en esta reflexión, me gustaría citar a un profesor libané-americano, Nassim Nicholas Taleb, que escribió “El cisne negro: el impacto de lo altamente improbable”. Taleb nos invita a reflexionar sobre la gestión de la incertidumbre y la complejidad y con qué tipo de razonamientos la afrontamos. En su libro anterior “¿Existe la suerte?: engañados por el azar” utilizaba el ejemplo que probablemente ya conoceréis del “pavo de Russell”, que llegó a formular su propia teoría sobre los hechos que observaba: “las personas me aman y son muy agradables conmigo porque todas las mañanas me dan de comer”. Al llegar el día de Acción de Gracias, se produce un hecho tremendamente impactante, inesperado y poco probable desde su experiencia como pavo (no como persona que lo alimenta) que desmiente su errónea teoría. La pregunta que me surge a continuación es:
¿Qué teoría o creencia (pavo de Russell) está poniendo en evidencia
esta situación que estoy viviendo como una adversidad?
En alguna ocasión todos hemos podido ser este pavo. Según Taleb a mayor frecuencia de ocurrencia de un hecho menor sensibilidad frente a lo inesperado”. De ahí la metáfora del cisne negro que Taleb desarrolla. A principios del siglo XVIII, los colonos ingleses que volvieron de Australia trajeron consigo, un cargamento de cisnes negros. Hasta ese momento, se pensaba que todos los cisnes eran blancos, porque eran blancos todos los que se conocían. Este hecho supuso una conmoción en la sociedad inglesa. Los cisnes son blancos. Comprobar que habían de negros generó un cambio de paradigma importante.
¿Cuántos cisnes negros han surgido en tu vida?
¿Cómo respondes a ellos?
Según Taleb hay dos hechos que nos condicionan. El primero es de índole genético-evolutivo ya que las personas no estamos preparadas para enfrentarnos a la incertidumbre, estamos preparadas para tomar decisiones en poco tiempo con muy poca información o basadas en teorías erróneas y seleccionamos solamente aquellos hechos que encajan en nuestras teorías (El pavo de Russell). Nuestra mirada tiende a encontrar aquello que está buscando. El segundo es nuestra formación cultural ya que procedemos de una escuela filosófica occidental donde preferimos tomar decisiones y afrontar la vida desde teorías estructuradas y comprensibles antes que aceptar la certeza del caos, el desorden y la compleja realidad de las interacciones humanas y sus consecuencias.
Por ejemplo, como coachs vamos a acompañar a directivos que en su rol ejecutivo no tienen ningún problema, saben planificar, programar y hacer cosas, pero desde su vertiente directiva se sienten perturbados cuando han de innovar o generar una visión de futuro para la organización. El tema es que no saben qué hacer cuando aparece un cisne negro en su escenario habitual. Los Coachs nos dedicamos a la profesión de acompañar, comprender y apoyar a personas y equipos humanos que se manejan en la complejidad. Conocer las aportaciones de Taleb nos permitirá ayudar a nuestros clientes a desarrollar su resiliencia. Aquí es donde nuestra labor como Coachs será vital para que nuestros clientes ganen seguridad y confianza. Estarán preparados para saber que, a pesar de que se dé un suceso de gran impacto, que no puedan predecir y que les sorprenda, poseen en su interior los recursos para afrontarlo exitosamente.
Características que podemos identificar en personas resilientes
El autoconocimiento, la paz interior, la facilidad para relacionarse con personas distintas, saber conectar con valores como el respeto, la responsabilidad, la integridad, la iniciativa, la esperanza y la confianza, haber tenido experiencias en distintos ámbitos profesionales, poseer sentido del humor, construir desde un pensamiento positivo, saber escuchar y empatizar, entrenarse en ponerse a prueba con regularidad en situaciones difíciles y facilidad para trabajar en la diversidad.
Las personas resilientes poseen algo distinto a las que no han desarrollado esta competencia, lo que las hace tan diferentes es lo que conocemos como DETERMINACIÓN, significa mantenerse firmes, afirmar su voluntad frente a toda adversidad. Significa poseer una fortaleza de espíritu tal que son capaces de superar cualquier obstáculo que aparezca en su camino. Si a la determinación le añadimos coraje y algo de fe, estas personas poseerán una energía inamovible, un poder que las va a impulsar a hablar cuando antes permanecían en silencia y a avanzar si estaban estancadas, a moverse si estaban quietas.
¿Qué nos puede ayudar a desarrollar nuestra resiliencia?
- Darnos tiempo para reflexionar sobre nosotros mismos y para flexibilizar nuestra manera de pensar las situaciones y a nosotros en ellas.
- Aprender a interpretar los acontecimientos de otra manera para desarrollar nuestra adaptabilidad, plasticidad, positividad para llegar a cambiar nuestras actitudes.
- Saber que podemos cambiar y no quedarnos con afirmaciones del tipo “yo soy así”.
- Saber que de todo podemos aprender sin dudar de nuestra capacidad de aprendizaje.
- Conectar con nuestra Creatividad y Autoconfianza.
- Desarrollar nuestra Perseverancia.
- Dejarnos fluir, relativizar y no aferrarnos a nuestras expectativas.
- Aprender a descubrir retos y oportunidades en las adversidades.
- Conectar con nuestra área espiritual para hallar la paz y el equilibrio interior.
- Sentirnos protagonistas de nuestra historia y no víctimas de las circunstancias.
Una fórmula para la resiliencia
Tom Peters, en su libro Las pequeñas grandes cosas (163 trucos para conseguir la excelencia) nos ofrece su fórmula para la resiliencia o cómo Prever lo Imprevisible. Para él son cuatro palabras: REDUNDANCIA, MARGEN EXTRA, PRECIO Y RESPIRAR.
La redundancia se refiere a tener varios planes alternativos antes de iniciar la acción. Tener en cuanta las contingencias.
El margen extra se refiere a disponer de tiempo para los imprevistos (de 4 a 5 horas antes de un evento importante).
La resiliencia tiene un precio. Las horas que no facturo, la inversión en planes alternativos, etc…
Respirar para calmarnos y hallar la paz interior que nos permitirá centrarnos en lo importante y confiar en nosotros mismos y en nuestros recursos.
Para finalizar
No olvides que en tu interior mora la resiliencia y eres tan capaz como el ave fénix de resurgir de tus cenizas, adversidades y de aceptar los cisnes negros que irán apareciendo en tu horizonte, lo que te permitirá revisar tus teorías erróneas (pavo de Russell) para elaborar otras más veraces, ricas, profundas y efectivas. Busca en tu interior y hallarás la determinación que te inspirará a lograr tus sueños y superar todos los obstáculos que como lecciones para aprender, la vida no dejará de ofrecerte.
Hermínia Gomà 12 abril 2012

Creo en las personas y en su enorme capacidad de aprendizaje. Trabajo con ellas desde sus fortalezas y capacidades para que puedan liderar sus vidas y lograr aquellos objetivos que se propongan.
Disfruto haciendo escuela y formando parte de un equipo de profesionales a los que admiro y de los que aprendo cada día. Cuando converso con un paciente, cliente o alumno pongo a su servicio mi intuición, mis conocimientos y experiencias y también mi escucha y comprensión.
Si tuviera que responder cuántos “cisnes negros” no sabría decirlo con exactitud, es decir, no puedo enumerar la cantidad exacta de “cisnes negros” que han surgido en mi vida, ya que eso depende de cómo definamos y percibamos estos eventos. Aún así todos hemos experimentado eventos inesperados y sorpresivos que han tenido un impacto significativo en nuestras vidas, y eso forma parte de nuestra historia vital.
En cuanto a cómo respondo a los “cisnes negros” mi enfoque es tratar de mantener una mentalidad abierta y flexible, lo cual no siempre es fácil. Reconozco que existen elementos de incertidumbre en la vida y que eventos inesperados pueden ocurrir en cualquier momento, también nos podemos dejar llevar por emociones muy intensas. En lugar de tratar de predecir o evitar todos los posibles “cisnes negros”, intento estar preparado para adaptarme y responder de manera efectiva cuando se presenten. En este sentido estoy deacuerdo con Taleb, no podemos predecir específicamente los “cisnes negros”, pero podemos tomar medidas para aumentar nuestra resiliencia y capacidad de recuperación frente a ellos. Esto implica diversificar nuestras acciones, estar preparados para diferentes escenarios y tener una mentalidad abierta para aprender y adaptarnos en situaciones imprevistas.
Com diu Nassim Taleb al seu llibre “El cisne negro: el impacto de lo altamente improbable”, no coneixem realment a les persones fins que no veiem els seus extrems, en situacions extremes, o en situacions fora de la seva normalitat; perquè en els extrems, o l’imprevisible és on pot aparèixer el “Pavo de Russell”… un extrem pot ser una situació adversa o de canvi, que porti a la persona als seus límits, on l’única manera d’afrontar-ho serà a través de la resiliència. Veure aquest procés, el qual és costós, pel fet d’estar immers en la imprevisibilitat del caos, només des de la capacitat de sentir-se protagonista en comptes de víctima, de saber que podem canviar, de desenvolupar perseverança, de saber que tothom pot aprendre, de trobar oportunitats en les adversitats, i de veure els fets des de la nostra adaptabilitat, farà que fem de la resiliència l’eina per combatre qualsevol repte imposat per un canvi o adversitat.
Lo que mas me llevo de este articulo es la gran importancia que tiene la resiliencia para el coach/terapeuta. Tal y como dice el articulo, cada cliente/paciente es un reto, por tanto es muy necesario el resurgir, no solo ante una “derrota” sino entendido también como un no darse por vencido, una generación de idees continua que poco a poco ira acercando tanto al terapeuta como al paciente hacia la ansiada “victoria”, que es la mejora de la vida de la persona. A demás, creo que la resiliencia también guarda relación con romper esquemas i deconstruirse, dando mucho pie a la introspección, cualidad muy positiva y necesaria en nuestra vida.
Quan tenim al cap unes expectatives, solem pensar en l’expectativa i el resultat. Si ho aconseguim estem satisfets, si no ho aconseguim o si veiem un altre aconseguint allò que nosaltres no hem pogut, tendim a pensar que és sort, experiència o inclús hores d’esforç i dedicació.
És important que ens parem a reflexionar sobre com ens enfrontem a les adversitats. A vegades la diferència no esà en l’esforç sinó en com ens enfrontem.
Això ens permetrà noe stancar-nos i fern-nos veure que si volem podem canviar tot all+o que ens proposem, nomès hem de parar atencó en com ho farem.
És una imatge molt clara la del “pavo de Rusell” per revisar creences errònies i la del cigne negre per veure els aspectes que estan menys conscients. M’ha agradat la metàfora de l’au Fènix per definir la resiliència i en la meva experiència, quan he sorgit de les “meves cendres”, mai he retornat allà mateix, ja que aquest procés m’ha enriquit com a persona i sempre ha estat transformador.
Moltes gràcies Hermínia per compartir les teves reflexions sobre una capacitat humana tan necessària a desenvolupar per assolir una mirada amorosa i senzilla cap a la vida. La vida, que ens regala oportunitats inesperades cada dia, per a poder treballar-la, ens presenta situacions que no contemplàvem on la nostra primera reacció emocional potser és sorprenentment nova, i a vegades, fins i tot pot arribar a descol·locar-nos, ja que des d’una concepció poc flexible de la nostra realitat, potser vivíem en un rol molt establert. És gràcies al poder de la resiliència, que acceptant aquesta primera sorpresa emocional, respirant, sense judici, podem preguntar-nos a què pot ajudar-nos aquesta nova situació, en quin aspecte de nosaltres podem créixer i desenvolupar-nos, connectant amb el desig d’integrar aquest nou trosset de nosaltres.
És una imatge molt clara la del “pavo de Rusell” per revisar creences errònies i la del cigne negre per veure els aspectes que estan menys conscients. M’ha agradat la metàfora de l’au Fènix per definir la resiliència i en la meva experiència, quan he sorgit de les “meves cendres”, mai he retornat allà mateix, ja que aquest procés m’ha enriquit com a persona i sempre ha estat transformador.
Las condiciones cambiantes de la vida nos hacen reconducirnos, adaptarnos y, sin más remedio, recuperarnos de ese nuevo bache que hemos tenido que esquivar o ese hoyo en el que hemos tenido que evitar caer.
Si me preguntaran, diría que, para mí, uno de los pilares fundamentales de la resiliencia es la red de apoyo, personas que ofrecen un espacio seguro donde podemos expresar nuestras emociones, compartir nuestras preocupaciones e impulsar nuestra motivación.
La resiliencia nos ofrece una ventana de oportunidades, de aprendizajes y de crecimiento personal.
Mi vida se tambaleó en dos ocasiones. Me enorgullece afirmar que, aunque no sin más, he intentado recomponer todo aquello que se descolocó. Reconozco que no ha sido un camino sencillo e innegablemente contar con personas, las cuales me han ayudado a apartar los obstáculos más pesados, me han descubierto caminos menos empinados o que simplemente han caminado junto a mí de la mano, ha hecho dicho recorrido mucho más ameno, mucho más manejable. A dichas personas, solo puedo dedicarles palabras de agradecimiento.
Nietzsche dijo: “Aquel que tiene un porqué para vivir, puede soportar casi cualquier cómo”.
Entenc que a la majoria ens donen respecte les adversitats, i penso que moltes vegades no comptem amb aquest enorme potencial que tenim com a individus per reinventar-nos davant aquestes situacions desfavorables. Tot i així, penso que no acostumem a ser gaire conscients d’aquest potencial, i és per això (i per altres raons segurament) que acostumem a voler agafar el control de les situacions, creient que així serem capaços d’impedir que aquestes adversitats esdevinguin. A la pràctica això serà només una falsa percepció de control, que probablement frustri més del que ajudi. Que la confiança sigui realment l’antídot de la por, m’indica que confiar en un mateix i en la capacitat que té un per reinventar-se (resiliència), és segurament l’alternativa més encertada.
Es inspirador leer artículos de este estilo con reflexiones tan profundas y valiosas sobre valores como lo es la resiliencia. Personalmente, me gusta como la lectura, destaca su importancia en la superación de adversidades y el desarrollo personal. Me parece muy interesante esta manera de explorar los diferentes aspectos que conforman este concepto, a demás, de no solo entenderlo como algo a desarrollar en uno mismo, sino también de tratar de fomentarlo a nivel comunitario con los demás. Me gusta cómo el artículo destaca la capacidad de transformación y crecimiento que la resiliencia brinda a las personas, comparándola con el ave fénix que resurge de las cenizas, y también como se enfatiza la importancia del autoconocimiento, la determinación y la actitud positiva como características clave de las personas resilientes.
Es importante abordar el tema del trauma. Existe una estrecha relación entre la resiliencia y el trauma, ya que la resiliencia implica la capacidad de superar y recuperarse de experiencias traumáticas. No todas las personas experimentan el trauma de la misma manera, y algunas pueden verse más afectadas que otras. La resiliencia desempeña un papel crucial en la forma en que una persona responde y se recupera del trauma.
Sin embargo, no todas las personas que experimentan un evento traumático desarrollan trastorno de estrés postraumático u otras dificultades relacionadas. Esto se debe a diversas razones, entre las cuales se encuentra la posible resistencia y resiliencia genética de cada individuo. Algunas personas pueden tener una predisposición genética que las hace más capaces de enfrentar y recuperarse del trauma.
Además, factores como el apoyo social adecuado y la búsqueda de ayuda profesional en salud mental también pueden influir en la capacidad de una persona para superar el trauma. En relación con este último, el proceso terapéutico puede ayudar a convertir un pasado traumático en un pasado biográfico y brindará la oportunidad de desarrollar la resiliencia necesaria para enfrentar y superar las dificultades emocionales y psicológicas que son necesarias para afrontar los desafíos de la vida.
Me encanta el concepto de resiliencia. Antes de leer el artículo, ha venido a mi mente la imagen de un ave fénix, es sin duda algo que representa muy bien este concepto y me ha encantado encontrarmelo en tu artículo Herminia. La capacidad de reinventarnos me fascina. Aprender de las circunstancias más escabrosas y convertirlas en una oportunidad de aprendizaje y crecimiento personal. Es un proceso duro, pero nos permite conectar con nuestras mayores fortalezas, conectar con todas las herramientas y recursos que nos han ayudado a resurgir de esas cenizas y así, poder implementarlas a la hora de hacer frente a futuros retos.
Hola, Herminia. Que bonita la metáfora del cisne negro para un cambio de paradigma y que larga la lista cosas que nos pueden ayudar a desarrollar nuestra resiliencia. I es que no es para menos, porque un cambio de paradigma supone un buen zasca, es decir, un choque repentino con una realidad que nos remueve. Algo que me gusta es el hecho de que todos tenemos la resiliencia en nosotros. Forma parte de nuestra esencia de seres vivos que evolucionamos en cada interacción con el mundo. Me llevo el dato de afrontar la vida como una escuela, para mí una actitud que caracteriza la esencia de la sabiduría.
Gràcies Herminia de nou, m’ha agradat molt la manera en la que tractes el concepte de resiliència i com contextualitzes els elements que interactuen en el seu desenvolupament.
L’article m’ha fet pendre consciència de la importància de la resiliència en el meu treball com a terapeuta. A través de la fortalesa interna, el suport extern i el significat personal, les persones pode, superar els obstacles i convertir les experiències difícils en oportunitats de creixement. A més, en la meva primera experiència com a terapeuta, ha sigut molt gratificant ser testimoni de la capacitat del meu pacient per a recuperar-se i desenvolupar resiliència en el camí cap a una vida més plena i satisfactòria.
Me ha gustado como se ha relacionado el ave fénix con la resiliencia, son dos conceptos que siempre he relacionado personalmente, siempre lo explico como que una parte de nosotros ha de morir porque ya no nos es útil y ha de resurgir algo más auténtico. Los “cisnes negros” que aparecen en nuestras vidas no son más que oportunidades para ejercer cambios, ya qué si estos sucesos se apoderan de nosotros y toman control de nuestras vidas, hay que reinventarse, ya que las estrategias que estábamos usando hasta ahora ya no nos sirven. En mi experiencia personal, detrás de todo duelo y pérdida hay un gran aprendizaje y recompensa esperando, y es la resiliencia entre otros, si somos capaces de volver a liderar nuestra vida, obtendremos más herramientas y autoconocimiento que antes, por lo tanto siempre hay un para qué detrás.
La resiliencia es sin duda una de mis cualidades preferidas. ¿Hay algo más inspirador que una persona que lo tenga todo en su contra y que sea capaz de sobreponerse a sus circunstancias y encima salir fortalecido? No lo creo. En la carrera hemos hablado largo y tendido de la resiliencia. Una persona que es la viva imagen de la resiliencia es Tim Guénard. En su libro “Más fuerte que el odio: cómo escapar de un destino fatal y convertirse en un hombre feliz a pesar de la desgracia” expone la durísima y atroz vida que tuvo. Estamos hablando de una persona que de pequeño fue abandonado por su madre: lo ató a un poste de electricidad cuando él tenía 3 años y el único recuerdo que tiene de ella es viéndola como se alejaba, mientras él quedaba desamparado en medio del bosque. Esta persona sufrió palizas a lo largo de su infancia, por parte de su padre, tan bestias que le fracturaron la mayoría de sus huesos y se pasó más de un año empotrado en la cama de un hospital para rehabilitarse sin que nadie le viniera a ver. A día de hoy Tim vive felizmente con su esposa y sus hijos, liderando una ONG, y dando charlas en colegios y en todo tipo de eventos hablando de su biografía y mostrando al mundo como sí es posible “escapar de un destino fatal” que parece que está escrito en piedra. Tim sin duda es pura inspiración y él por sí mismo es, si se quiere, “un cisne negro”, un fuera de serie se mire por donde se mire. En conclusión, todos podemos aprender a ser más resilientes, a conectar con nuestro fortaleza, y es gracias a personas como Tim que nos alimentan con esperanza que podemos hacerlo.
Hola Hermínia, gràcies altre cop per les teves paraules. Com bé dius, la capacitat d’acceptar, respondre i superar situacions imprevisibles és una eina imprescindible per superar i aprendre de totes aquelles adversitats que la vida ens posa davant. Aquest article m’ha fet pensar en la película que va sortit fa uns dies a Netflix “El país de los sueños” dirigida per Francis Lawrence i escrita per David Guion i Michael Handelman. La película parla del dol d’una nena que perd el seu pare i ha d’anar a viure amb el seu tiet. Al principi la manera d’afrontar el problema de la protagonista és no acceptar-lo, reprimir les emocions, aïllar-se. A través dels somnis i de compartir experiències amb altres personatges ficticis se n’adona de com cal que accepti la situació i que continui endavant amb la seva vida. Per tant, posa en pràctica la seva capacitat de resiliència.
Volia afegir que el posar en pràctica aquesta capacitat de resiliència és un procés que pot generar malestar, ens pot remoure per dins, però alhora ens omplirà de proposit. Un dels personatges de la película diu “ser valiente no es no tener miedo, es hacer las cosas aunque tengas miedo”. Així doncs, prendre consciència d’aquesta resiliència interior i donar-li ús pot ser alhora que intrigant, molt estimulant i molt positiu per ser capaces d’afrontar la vida de la millor manera possible.
M’agrada com en aquest article es fa referència a la resiliència com a l’oportunitat de generar canvi, tenir la ment i els ulls oberts a acceptar que les situacions, la vida i els contextos són canviants i hem d’estar preparades per adaptar-nos a aquests canvis. Això veig que va molt lligat a la manera de treballar des del coaching teleològic, ja que com bé es diu en aquest article i en anteriors té el focus posat en el futur i el nucli del procés és el ” para qué?”, que ajuda a centrar en futures situacions i contextos al client.
M’agrada com en aquest article es fa referència a la resiliència com a l’oportunitat de generar canvi, tenir la ment i els ulls oberts a acceptar que les situacions, la vida i els contextos són canviants i hem d’estar preparades per adaptar-nos a aquests canvis. Això veig que va molt lligat a la manera de treballar des del coaching teleològic, ja que com bé es diu en aquest article i en anteriors té el focus posat en el futur i el nucli del procés és el ” para qué?”, que ajuda a centrar en futures situacions i contextos al client.
Al final si trabajamos el autoconocimiento y la identidad se reflejará una mejor gestión de conflictos o afrontamiento de situaciones. Cuando sabemos cómo somos, para bien y para mal, podemos aceptarnos y así podemos cambiar o trabajar aquello que no nos guste. Por tanto, potenciamos la plasticidad y estamos más abiertos a nuevos aprendizajes. Estamos más conectados a nuestro centro, a nuestro eje, y así tomamos decisiones más acertadas o adaptativas y de autocuidado. Entonces, no tenemos tanto miedo ante situaciones que requieren de resiliencia, sino que esta competencia se ha desarrollado lo suficiente para que nuestra respuesta sea adaptativa.
Recomiendo este vídeo del neuropsiquiatra Boris Cyrulnik sobre qué es y cómo funciona la resiliencia: https://youtu.be/_IugzPwpsyY
Nunca he estado muy familiarizada con el concepto de “resiliencia”, porque no conocía hasta hace poco muy bien su significado. Sin embargo, considero que ser una persona resiliente debería ser un objetivo en la vida,¡: conocernos, tener paz interior, saber que eres capaz de “resurgir de las cenizas”, afrontar adversidades y hallar en nuestro interior la inspiración para alcanzar nuestro objetivos y sueños.
Me quedo con la metáfora de Taleb y las preguntas: ¿Cuántos cisnes negros han surgido en tu vida? y ¿Cómo respondes a ellos?
Liderarse también implica tener trabajados nuestros recursos para poder hacer uso ante nuevos desafíos.
Me ha llamado la atención que la resiliencia tiene un precio: tiempo extra, esfuerzo, autoconocimiento, terapia, reflexión… También parte de este precio es el trabajo de aprender a reinterpretar las dificultades. Es una gran verdad que en las adversidades ganamos o aprendemos, pero aplicarlo y no dejarse llevar por la afectividad negativa que supone perder, me suena difícil… Pero desde luego por muy difícil que suene, los beneficios lo compensan con creces, y liderarse es una parte clave para desarrollar este aprendizaje.
La resiliencia me parece una habilidad muy valiosa. Personalmente, soy una persona que me cuesta manejarme en situaciones que hay que improvisar. Por eso para mí tiene mucho valor ser capaz de aceptar, responder y superar situaciones imprevisibles.
Destacaría del artículo el hecho de percibir el cambio como una o la adversidad como un reto, como una oportunidad para superarse, aprender y fortalecer tus capacidades
.
Considero que la emoción que he experimentado ante sucesos inesperados ha sido miedo y me ha llevado más bien a la parálisis.
Resaltaría la determinación, “afirmar tu voluntad frente a toda adversidad”, ya que pienso que es algo realmente difícil de hacer en algunas situaciones y que requiere mucha valentía.
Estoy muy familiarizada con el concepto de resiliencia, llevo tiempo informándome al respecto con el objetivo de serlo. En este tiempo que he estado trabajando en ello, en mi proceso terapéutico, me he dado cuenta de que en el momento que empiezas a trabajar para ser resiliente ya empiezas a ser un poco más resiliente y eso en sí ya es motivador.
Lo que me ha gustado más de este artículo es cuando Herminia ha hablado sobre la determinación, definitivamente es una de las características principales de una persona resiliente y de todas aquellas personas que admiro en mi vida. Ser capaz de mantenerte fuerte en tu voluntad a pesar de las adversidades es una cualidad que me parece impresionante, y el hecho de que se haya hablado me ha hecho ilusión.
Cuando pasamos por un proceso doloroso es cuando aparece la resiliencia. Cada persona la lleva como puede, y muchos tendemos a centrarnos más en los aspectos negativos, en la pérdida, que en los positivos, en lo que aprendemos.
La resiliencia para mí es una habilidad que en pequeña o gran medida todos tenemos la capacidad de desarrollarla. Eso sí, siempre siendo subjetiva su expresión y la manera que tenemos de llevar las situaciones. Pero sí, pienso que podemos entrenarla porque somos flexibles cognitivamente. Somos capaces de romper nuestros esquemas mentales y generar otros.
La metáfora del ave fénix me ha recordado a una frase de una serie que vi hace unos días (The Hundred), que decía “From the ashes we will rise”. Se decía en unos tiempos duros, en los que la moral de los personajes estaba por debajo tierra, y entre ellos se consolaban. Su capacidad de resistir, a pesar de las mil desgracias por las que han pasado, de seguir adelante es para mi una clara definición de resiliencia.
Nunca he tenido presente el concepto “resilencia”, si lo creo haberlo tenido presente en mi forma de hacer las cosas, pero nunca lo había materializado, en una palabra. Me gusta poder describir con una sola palabra la frase de “resurgir de mis cenizas”. Aunque creo que para mi no significa tanto salir victorioso de una situación ambigua o desbordante, porque esto lo interpreto como suerte, más bien considero ser resiliente, saber por qué consigo salir victorioso de esas situaciones. También considero a alguien resiliente cuando conoce sus limitaciones y lo que puede y no hacer.
Molt interessant i enriquidor aquest article sobretot per tot el que diu però també pel simple fet de donar-li veu a la resiliència i a tot el que l’envolta i el que comporta. Crec que no es parla lo suficient d’aquesta competència i realment és molt important. Per això consdiero que aquest article és molt important, perquè sincerament en la meva experiència personal gairebé mai he sentit a parlar d’aquesta competència fora de l’àmbit acadèmic i crec que això és un gran error en l’eduació. Tot el que explica, els exemples que posa, les comparacions, les preguntes, les tècniques… són de gran importància i tant de bo arribés a moltes més persones el contingut d’aquest article i els ajudés i els servís com m’ha servit a mi.
Jo soc molt partidari de pensar que “todo lo que sucede, conviene” i no des del sentit d’acceptar tot allò que vingui sense qüestionar-ho, o que tot allò que passi serà bo per naturalesa. No té per què ser així. Però sí que es pot aprendre de tota situació i qualsevol aprenentatge sí que convé, com diu la frase. Crec que és una frase que parla molt de resiliència, i de transformar algun succés a priori dolent, en bo per a la teva persona.
Intentar veure els problemes com un repte personal, ja sigui per superar el problema o per desenvolupar la capacitat de recuperar-se d’allà on hagis caigut. L’únic que normalment aquest pas necessita temps, perseverança, sacrifici i esforç personal. Lo qual moltes vegades volem les coses més fàcils en el nostre dia a dia.
Encuentro que es un artículo muy necesario para darle la importancia que se merece el concepto de “resiliencia”. Para mí, la base reside en la capacidad de aprendizaje tras esas experiencias “desagradables”. No todo lo que nos sucede lo escogemos y debemos entender que el mundo es incierto, lo que sí está en nuestra mano escoger es qué hacemos con aquello que nos sucede y qué actitud tomaremos. Para llegar a este punto considero que el autoconocimiento, la confianza, la aceptación y la responsabilidad son elementos básicos de la resiliencia.
Crec que el terme “resiliència” va molt relacionat amb el d’acceptació i l’adaptabilitat. Considero que quan acceptes la situació tal i com et ve (ja que està fora del nostre control) i aprens a adaptar-te a les adversitats que es van presentant pots tenir aquesta capacitat de resiliència i tirar endavant amb forces.
Personalment fa pocs mesos em va succeir un fet imprevist que em va generar molt malestar. En aquell moment vaig percebre la realitat com injusta i estava enfadada amb el món, intentant trobar respostes que pensava que em tranquil·litzarien o que canviarien la realitat. Vaig aprendre però, que la situació que es va donar no depenia de mi, però la reacció davant d’aquesta i l’acceptació de la mateixa sí. És aquí on em vaig aferrar, al canvi de perspectiva de les coses, i vaig aconseguir adoptar una actitud resilient, poc a poc, centrant-me en mi.
Último articulo. La resiliencia. Que bien haber ido en orden y habérmelo dejado para el final.
Desde que empecé a hacer las practicas en el Institut Gomà aún estoy mas familiarizada con este concepto.
Me ha gustado mucho como se enfoca el concepto de resiliencia desde diferentes prismas. En el articulo se habla de “una proyección hacia el futuro” como una forma de saltar pasar por encima del obstáculo y poder continuar con tu camino o como desde el punto de vista de la física, la capacidad de “volver a la forma original”.
Al fin y al cabo la resiliencia tiene que ver con afrontar, con dejar de evitar las situaciones complicadas y adentrarnos en ellas. Adentrarnos con todo lo que implica eso: dolor, angustia, agotamiento… Pero también implica salir con la satisfacción de haber conseguido avanzar.
La resiliencia es una forma de pasar a la acción, de salir de los círculos negativos que (a veces) dominan nuestras acciones y empezar a ser más flexibles mentalmente. Empezar a responder que “Si podemos” antes que un no. Empezar a entrenarnos en el arte de afrontar la vida.
Hace poco debatía con un buen amigo sobre si podemos ser resilientes ante cualquier situación. El me decía que si, que el ser humano es capaz de afrontar cualquier situación si se entrena (física y mentalmente). Yo no es que opine lo contrario pero si tengo dudas. Adoro el concepto de “resiliencia” pero a veces dudo si puede ser aplicable a cualquier circunstancia.
De igual forma, considero que la base de la resiliencia es la capacidad de ver un obstáculo como una oportunidad y no como un atraso en el camino.
El término resiliencia me parece una palabra muy bonita ya que para mi refleja el empoderamiento y la superación personal. Sin embargo, me gustaría matizar el concepto, ya que yo a través de un trabajo me di cuenta que la resiliencia no es tanto una capacidad sino es la consecuencia. Es decir, encontrarte en una situación potencialmente desbordante y salir con éxito de ella. Entonces, la pregunta aquí seria; ¿De que depende de que salgamos ”victoriosos”?
A través, de la investigación me di cuenta que dependía de muchos factores, como ahora las capacidades, los estilos de afrontamiento, el entorno, nuestra personalidad, el suporte social y sobre todo, la gestión emocional. Me di cuenta, una vez más, de la importancia de la gestión emocional. Al fin y al cabo encontrarnos con situaciones desagradables conlleva un conjunto de emociones negativas que si no sabemos gestionarlas estas se pueden magnificar, hasta el punto de llegar a desbordarnos. Por lo tanto, para mi ser resiliente es tener unas herramientas ya cosechadas. Así mismo, puedo afirmar con total seguridad que la resiliencia también se puede trabajar.
Me parece super interesante que se hable sobre la resiliencia en el último artículo a comentar. Considero que la vida está llena de adversidades que debemos ir afrontando y adaptándonos a ellas. Me ha gustado la comparativa que hace con el ave fénix ya que, de todas estas adversidades a las que uno se va afrontando en la vida se aprende. Todas estas están marcadas por fases en las que habrá idas y venidas pero siempre se aprenderá de ellas.
Resaltar que la capacidad de resiliencia se puede llevar tanto al terreno del coaching como al de la psicología. Estoy muy de acuerdo con que cada paciente/cliente es un reto nuevo a asumir, con demandas totalmente diferentes. Nuestro trabajo aquí es adaptarnos a ellas y saber actuar de la manera más adecuada.
Por otro lado, me gustaríai comentar el caos y la incertidumbre que se resalta en la teoria del cisne negro. Creo que todos nosotros tenemos miedo cuando nos encontramos en medio de este caos. Llegados a este punto, creo que es trabajo propio tener las herramientas suficientes para hacer frente a este caos y salir con un aprendizaje óptimo de este.
Por último decir que el hecho de ser resiliente no es nada fácil. Estoy totalmente de acuerdo que todas las personas tienen un potencial increíble, aunque, a veces, por diferentes circunstancias vitales, enfrentarnos a las diferentes incertidumbres de la vida nos cuesta más. Dicho esto, que se expongan en el artículo diferentes herramientas para hacer frente a la resiliencia me parece muy enriquecedor.
Es interessant com podem connectar la resiliència amb la nostra corporalitat. Quan ens trobem en una situació desfavorable o complicada, la majoria de vegades tendim a enfocar-nos al costat negatiu i no mirar més enllà, però connectar-nos amb aquesta resiliència ens ajudarà a aprendre des d’un angle diferent, afrontar-los amb altres ulls.
M’emporto la metàfora de l’au fènix, com ressorgeix de les cendres, i com podem fer el mateix a la vida per continuar transformant-nos i continuar creixent encara després d’experiències o circumstàncies adverses. Educar les nostres infants en base a al resiliència generaria una societat molt més empoderada i mentalment sanes.
Es interessant la reflexio proposada envers la resiliencia. Crec que quan ens trobem en situacions adverses o complicades, la major part de les vegades tendim a centrar-nos en els aspectes negatius i no veiem més enllà però connectar amb aquesta capacitat de resiliència ens ajudarà a prendre un altre punt de vista, a aprendre fins i tot de les situacions adverses ia afrontar-les amb una altra visió.
Em ressona molt la metàfora de l’au fènix, de com aquest ressorgeix de les cendres i de com nosaltres podem fer de la mateixa manera a la nostra vida i continuar transformant-nos i creixent fins i tot després de vivències o circumstàncies adverses.
Molt nutritiu l’article.
La Resiliencia, un concepto muy importante y poco conocido, a mi parecer. La resiliencia es la capacidad que tiene una persona para superar circunstancias traumáticas como la muerte de un ser querido, un accidente, etc. Creo que todo el mundo tiene esta capacidad solo que a niveles distintos y depende de su estado anímico en ese momento es cuando sacan esta capacidad o no.
Al final es una capacidad importante para nuestra vida, ya que en muchas ocasiones nos encontraremos en situaciones limites donde podamos tocar fondo, pero debemos ver las “cosas buenas” de esa situación y aprehender de ello.
La duda que me causa el tema de la resiliencia es si somos siempre resilientes, es decir, puede haber habido sucesos traumáticos en nuestra vida que hemos superado y aprendido de ellos, que nos han quedado cicatrices de esos eventos, pero que aún así los hemos pasado con nota y somos mas fuertes que antes.
En cambio, entrar en bucles mentales de miedo cuando nos vemos en medio de la incertidumbre. Dónde nuestro cerebro elige la información como bien dice el post que más se asemeja a aquel miedo que tenemos. En ese caso ¿somos resilientes?
¿Se es o no se es?
“Todo cambia, cuando sueltas. Todo fluye cuando no fuerzas. Todo llega cuando no lo esperas. Todo sana cuando aceptas”.
Descubrí el concepto de resiliencia y su significado cuando empecé la carrera de psicología, y aún tengo el recuerdo muy presente de cómo eso me hizo sentir. Y es que, me pareció revelador que se pudiera definir un proceso de transformación de este calibre con una sola palabra. Tan breve y bien sonante pero que engloba una de las verdades más trascendentales que conozco y que , a día de hoy llevo por bandera. Me fascina conectar con la idea de que, el ser humano por naturaleza tiene esa habilidad intrínseca. Una habilidad que todos poseemos, en menor o mayor medida, pero sobretodo una habilidad que podemos potenciar y desarrollar tantas veces como cisnes negros aparezcan en nuestra vida, haciéndonos más fuertes, aprendiendo de cada golpe y convirtiéndolo en una nueva oportunidad para dar lo mejor de nosotros, únicamente por y para nosotros.
La resiliencia es, en ultima instancia, la energía que nos moviliza en cualquier proceso. Es la base de la aceptación, confianza, la responsabilidad y la autoestima. Aquello que nos recuerda nuestro valor, cuando más sentidos nos perdemos. Lo que nos invita al afrontamiento de las peores adversidades prometiendonos un “yo mejor” al final del proceso. De nosotros depende abrazarla y atrevernos a pasar a la acción. Determinación como cita el texto. Dejar de ser seres reactivos y convertirnos en activos, siendo el “para qué” nuestro punto de partida.
Potenciar mi resiliencia, es lo que me hace sentirme orgullosa de quien y como soy yo en este momento de mi vida, y sé , que todas esas veces que perciba que la vida va a contracorriente, será lo que remará conmigo.
Me gusta visualizar la resiliencia como una mariposa y su proceso de metamorfosis, que, tras dejar atrás el estilo de vida que llevaban desde su nacimiento(pasado) y encerrarse durante largo tiempo(autoconocimiento), logran finalmente emerger transformada en un ser totalmente renovado, capaz de volar y llegar a distancias que antes no hubiese podido.
Me recuerda que nada es permanente en esta vida, y que a los cambios hay que abrazarlos.
La clave de la resiliencia no solo es la flexibilidad de poder adaptarse a las situaciones que se presentan y no perder el control sobre estas, sino también la capacidad de superar los problemas, aprender de ellos y salir fortalecidos.
Gracias a este artículo he podido ver cómo tratar la resiliencia desde un proceso de coaching. Además me ha parecido útil e interesante cómo desarrollar la resiliencia y todos los beneficios que nos aporta.
Normalmente un “¿para qué?” puede ayudarnos mucho más que un “¿por qué?” con el fin de centrar nuestros propósitos y el sentido de las cosas.
Leyendo este artículo he tomado consciencia de la importancia, como profesionales que somos, de desarrollar nuestra propia resiliencia antes de ayudar a desarrollarla a nuestro coachee.
Para desarrollar nuestra propia resiliencia es importante luchar contra las inseguridades que pueda generar la incertidumbre, ya que esta equivale a caos y nosotros, como sociedad occidental, tendemos a recurrir al orden y control. Es esencial realizar un trabajo de introspección y autoconocimiento, evaluando cuáles son nuestros valores vitales.
Para finalizar, agradecerte que hayas compartido la fórmula de la resiliencia (o como prever lo imprevisible) de Tom Peters. La verdad es que lo desconocía completamente y me ha parecido muy interesante y sensato. Me ha hecho conectar con la flexibilidad. Para poder ser resilientes creo que debemos ser más flexibles ante los acontecimientos que la vida nos pueda presentar, ser valientes ante lo que nos pueda generar la incertidumbre.
La clave de la resiliencia no solo es la flexibilidad de poder adaptarse a las situaciones que se presentan y no perder el control sobre estas, sino también la capacidad de superar los problemas, aprender de ellos y salir fortalecidos.
Gracias a este artículo he podido ver cómo tratar la resiliencia desde un proceso de coaching. Además me ha parecido útil e interesante cómo desarrollar la resiliencia y todos los beneficios que nos aporta.
Normalmente un “¿para qué?” puede ayudarnos mucho más que un “¿por qué?” con el fin de centrar nuestros propósitos y el sentido de las cosas.
Desde mi punto de vista, todos somos resilientes solo que no todos estamos conectados con ella. Hay personas que si no se identifican con la resilencia es porque necesitan conectar con su paz interior, conectar con valores como comenta Herminia, como la responsabilidad, el respeto, la iniciativa, la esperanza, etc. Creo que una persona resiliente es aquella también que se conoce a si misma y ello es lo que le permite mantenerse en la posición de la determinación y de la “no duda”, confiar con tus propias capacidades y fortalezas, y en los momentos difíciles confiar que tienes las capacidades, habilidades, fortalezas, energía, etc para superarlos.
La resiliencia es, bajo mi punto de vista, una habilidad y fortaleza que se entrena, se adquiere y refuerza gracias al paso de los años y las experiencias adversas vividas con ellos. Por tanto, partiendo de ese punto: no hay personas resilientes y personas no-resilientes, sino personas que han desarrollado la habilidad y personas que aún no han tenido la oportunidad de llevarla a cabo. Es curioso como, si procuramos hacer memoria, seguramente recordemos momentos pasados de nuestras vidas en los que todo se nos hacía un mundo y no veíamos salida alguna. Poder tomar la perspectiva desde el aquí y el ahora para observar como la capacidad de resiliencia se ha fortalecido a lo largo de las experiencias vividas, supone un gran logro que nos conecta con la gratitud y el empoderamiento personal. Quizás, otra forma de concebir la resiliencia sea como el premio del malestar psicológico o emocional vivido en algún momento dado de la vida, en forma del aprendizaje más valioso para seguir adelante y la fuerza a la que aferrarse en momentos difíciles. El “para qué” de la resiliencia es el crecimiento, la transformación de la persona y me gusta relacionarla con la capacidad de la persona para responsabilizarse y, por tanto, de ser un ente activo en su propia vida que actúa, no reacciona. A parte de hablar de actuar, me parece acertado relacionar también la resiliencia con la capacidad de aceptar, desde una actitud contemplativa y no juiciosa ni de lucha. Resiliencia es pasar a la acción, pero también es aprender a discernir entre cuando hacerlo y cuando es conveniente y sano aceptar la realidad. Por tanto, y como conclusión: resiliencia es saber aplicar la experiencia en el momento de decidir cómo responder a la realidad ante la que me encuentro para encontrar la opción más sabia.
Si de algo me siento orgullosa de mi misma, es que, muchos de mis amigos al describirme, me han descrito como una persona RESILIENTE. Debo decir que aun me queda mucho por aprender, pero sin duda estoy convirtiéndome poco a poco, en una experta de mi misma y eso me favorece en conocerme delante de muchas situaciones y buscar vías. Eso sí, me ha gustado mucho una parte del artículo donde pone:
La resiliencia tiene un precio. Las horas que no facturo, la inversión en planes alternativos, etc…
Ostras si lo tiene! Al principio tube siempre un amor-odio con este sentimiento de buscar vías constantes a las cosas, ser resiliente a veces implica, que tu cabeza no para! Aun así, hay que aprender a ser resiliente y ir controlando los sentimientos que esto te provoca. Estoy muy feliz que me vean así y de verme cada vez más resiliente yo a mi misma.
El término de la resiliencia se ha utilizado mucho durante estos últimos años pero me ha gustado leer este artículo ya que expresa diferentes puntos de vista de un mismo término.
Una vez más la pregunta ¿para qué? abre puertas para seguir un camino y avanzar, ya que con esta pregunta te centras en el propósito tu objetivo, te centras en la acción, en vez de lamentarte y quedarte en el ¿Por qué?.
Como bien se comenta, Taleb, las personas no estamos preparadas para enfrentarnos a la incertidumbre, sino a la impulsividad de toma de decisiones o basadas en un corto tiempo para obtener resultados. Evitamos el caos, desorden y las complicadas estructuras para aceptar la realidad. “Nuestra mirada tiende a encontrar aquello que está buscando” Qué curioso y qué cierto es: sesgo confirmatorio y atención selectiva para confirmar nuestras teorías e hipótesis.
Nunca me habían mostrado la fórmula para la resiliencia o para prever lo imprevisible. Cómo la redundancia, el margen extra de tiempo, el precio y el respirar van a favor de nuestra superación personal teniendo en cuenta la importancia del autoconocimiento y determinación
La vida es impredecible y ser resiliente nos ayuda a afrontarnos a la vida con la confianza de que conseguiremos resurgir y reconstruirnos ante adversidades. Hay veces que las personas llegamos a ser rígidas e intentar controlarlo todo, pero lo que realmente nos ayuda es ser resilientes, entender que no sabemos que puede suceder y confiar en que conseguiremos superarlo.
Una bonita manera de ver la resiliencia es el Kintsugi o Kintsukuroi, una técnica japonesa que consiste en reparar con oro objetos, en vez de ocultar las fracturas o disimularlas. Demuestra que si tenemos un desafío, podemos ser capaces de superarlo.
Aquest article m’ha fet pensar sobre una frase del llibre de L’Origen de les espècies de Charles Darwin: “No són els més forts de l’espècie els que sobreviuen, ni els més intel·ligents. Sobreviuen els més flexibles i adaptables als canvis”. Tal com es menciona a l’article, una persona resilient té la capacitat per adaptar-se davant als canvis. Tot i això, la resiliència és una qualitat que s’anirà desenvolupant al llarg de la vida. Serà important acceptar-se a un mateix, acceptar les mateixes emocions i veure els obstacles com a una nova oportunitat per a seguir creixent.
Este post me ha hecho pensar en esta idea del “Pavo real” de que siempre tenemos que hacer algo para arreglar un problema, cuando la verdad es que muchas veces es suficiente un cambio de perspectiva para disolver lo que habíamos planteado como un problema. Me viene a la mente esta imagen de una herida que se cicatriza sola, basta que no lo rasquemos todo el rato. Pensar que la capaciad de curar, es una propiedad intrínseca de nuestros cuerpos me lleva confianza y fuerza para seguir adelante ante las dificultades. Creo que nuestro mayor rol es trabajar en el desapego y entregarle una libiandad los conflictos, soltando el control.
Me ha encantado este comentario, porque la resiliencia no es un don que solo unos pocos privilegiados tienen, realmente TODOS podemos desarrollar esta habilidad. Algo que me sorprende es que la resiliencia en física hace referencia a la capacidad de volver a la misma forma, sin embargo las personas resilientes no vuelven a su misma forma, sino que todas esas adversidades, problemas les ayuda a crecer a desarrollarse.
Creo que uno de los grandes errores del ser humano es la falta de confianza en sus propios recursos. La resiliencia es esa capacidad de sobreponernos a las adversidades, encontrando recursos y capacidades que nunca llegamos a imaginar que teníamos. Una vez más se trata de confianza, confianza en nosotros mismos, en los demás y en la vida. No perder la esperanza es la base que nos da fuerza para perseverar en el camino hasta conseguir salir adelante. Cada vez saldremos reforzados, conscientes de las capacidades que tenemos. Cuantas veces personas que han sufrido un duro golpe en la vida dicen no querer cambiar la experiencia vivida debido al aprendizaje sobre sí mismos que esta les ha aportado.
La palabra resiliencia la descubri mientras cursaba el grado de psicologia, y a raíz del dia que la descubrí decidi que seria una palabra que no olvidari jamás. Como bien se describre en el post: la capacidad de aceptar, responder y superar situaciones imprevisibles de manera satisfactoria. Me parece que la resliencia se deberia enseñar desde que somo pequeños, estrategias para poder enfrentarnos a situaciones a las que puede que incialmente no estamos prepados.
Me parece muy interesante este articulo y como esta encarado para promover y practicar esta resiliencia con las distintas estrategias que se proponen.
El otro día visioné la serie basada en hecho reales de Netflix llamada “The innocent files”. Documenta diferentes historias; cada una de ellas trata de una injusticia llevada a cabo por el sistema tanto jurídico como policial. Personas que son acusadas de crimen cuando no existen pruebas suficientes que lo demuestren, cuando se otorga el poder total a la memoria de un testigo traumatizado por el mismo evento o cuando se da la coacción por parte del mismo sistema a terceras personas para que acaben contando versiones inventadas. Me impactó un montón como desde el poder y la “justicia” las vidas se pueden llegar a tomar tan a la ligera. Todos los casos que aparecen en el documental son casos de personas inocentes que tuvieron que cumplir con una sentencia de 20, 30 años o incluso cadena perpetua.
Me refiero a estas personas porque cada una de ellas decidió no rendirse antes esta situación tan “injusta” en manos de la justicia; decidieron saber cuáles eran todas las posibilidades dentro de esta situación tan oscura y adversa. Nunca desconfiaron de su inocencia y de su (in) criminalidad. Resulta que tras años y años y con ello también la evolución de la ciencia (estudios del ADN), acabaron por llegar a la verdad; dictaminando y corroborando la inocencia tan luchada.
Y no únicamente me refiero a las personas que estaban entre rejas, sino a aquellas que lucharon, desde la incertidumbre y el conocimiento de si el sistema judicial les iba a hacer caso; todos aquellos abogados de oficio que reunieron la fuerza suficiente para luchar por la verdad aún y las circunstancias tan adversas. Para mi este es un ejemplo muy grande de resiliencia, tal y como se define en el artículo: “en situaciones críticas, sobreponerse y tomar el poder sobre la situación, en lugar de evadirse, huir o bloquearse”; “capacidad para proyectarnos proactivamente en el futuro con independencia de las dificultades que aparezcan”. Estas personas se querían imaginar libres porque merecían su libertad como la vida misma y decidieron no rendirse. El para qué (ser libres) pesaba mucho más que el por qué (por qué me ha tenido que pasar esto a mi- se lo preguntaron obviamente pero no se podían quedar en ese pensamiento siempre).
Me vienen a la mente muchas personas que han sido resilientes a lo largo de su vida. Todos tenemos que sacar esta parte de nosotros mismos en algún momento y estar dispuestos a luchar. Desde lo más discreto a lo más existencial.
Me acuerdo de una clase de spinning en la que el entrenador tenía que estar pendiente de mil cosas al mismo tiempo y tenerlo todo bajo control: las luces, la música, la interacción con el público, su ejercicio que servía como rol modelo para el resto del grupo, la energía que sostenía y brindaba, la sonrisa (…). Un montón de factores. En un momento determinado, tanto la música como las luces se fueron “al garete”; no una vez sino unas cuantas. La manera como reaccionó me pareció admirable. No se puso nervioso (si fue así nadie se enteró), supo mantener la calma y transmitirla al público. No se rindió, y continúo con la mejor energía que pudo en aquellos momentos en los que la luz no reaccionaba o en que la música se entrecortaba. Supo afrontar esa situación de la mejor manera; “la capacidad de aceptar, responder y superar situaciones imprevisibles de manera satisfactoria”. (El para qué es superior al por qué: quiero salir de esta para que toda la gente que ha pagado esta clase esté igual de satisfecha).
“Dejarnos fluir, relativizar y no aferrarnos a nuestras expectativas” me parece algo crucial para no desistir. Ese relativismo es el mismo que te da alas y energía para continuar luchando. Nada es tan importante y todo lo es. Desde ese punto, jugar es más divertido!
¡Graciiias!
Vivir implica pasar por situaciones buenas y por otras no tan buenas o incluso realmente malas. Creo profundamente en la idea que refleja este artículo sobre las capacidades a veces incluso insospechadas de resiliencia que tenemos las personas. No creo que la resiliencia sea afrontar todas las adversidades rápidamente con éxito sino ser capaz de hacerlo con fueza y confianza en uno mismo. Si se cuenta con eso, a la larga todas las situaciones pueden vencerse, y hay mil formas de vencer, adaptándonos a aquello que nos sucede y transformándolo en algo mejor.
A medida que he ido leyendo diferentes artículos de Herminia, me he dado cuenta de la gran importancia del autoconocimiento: para nuestra capacidad de resiliencia, para superar una ruptura, para aprender a perdonarnos, para superar nuestros miedos, para liderar nuestras relaciones de pareja… La verdad, nunca le había dado demasiada importancia. ”Ya te conocerás” pensaba. Des de que llegué al Institut Gomà me he planteado muchas cosas y me he permitido muchas otras, pero lo que sí que me llevo seguro es la gran importancia que tiene reservar un momento de tu vida, o los momentos que hagan falta, para escucharte, para conocerte, y para saber quién eres.
Resilencia es una de mis palabras favoritas puesto que su significado, lo que representa, tiene un inmenso valor para la vida. Es una capacidad básica de supervivencia y, como mayor sea dentro nuestro, más ligeramente superaremos las adversidades que nos traiga la vida. Las claves que nos da el artículo para trabajar este preciado valor són muy potentes, empezando con el “Para qué” en vez del “Por qué”, que por inercia nos suele salir de preguntar. Es mucho más útil y provechoso un “Para qué” el cual nos coloca en nuestra área de influencia, lo que nos permitirá pasar a la acción de manera consciente y responsable, como se dice aquí. Además, como futuros/as psicólogos/as, la gestión de la incertidumbre y la complejidad va a ser muy importante si queremos ayudar a otras personas de una forma más eficaz, un motivo más para mi por el cual este concepto es importante.
Me ha parecido un artículo magnífico, con aportaciones interesantísimas, entre ellas, Nassim Taleb, voy a leer más sobre este autor ya que lo que he he visto aquí me me ha parecido muy enriquecedor. Gracias Herminia
A lo largo de nuestra vida experimentaremos situaciones adversas que nos hacen sufrir. Estas vienen en nuestra condición de humanos y son una experiencia vital más. Cuando estos hechos ocurren es el cómo nos posicionamos delante de ellos es nuestra decisión. ¿Cómo decidimos posicionarnos delante de una realidad inevitable? ¿Resignamos y nos centramos en lo negativo o decidimos intentar buscar los aspectos positivos que se pueden derivar de esta? ¿Qué nos impide hacer la segunda? ¿Qué necesitamos para conseguirlo? ¿Es una derrota o un reto que podemos superar?
Este artículo pone en evidencia la importancia de desarrollar aspectos como el autoconocimiento, la adaptabilidad y el conectar con nosotros mismos a la hora de mostrarnos resilientes. La capacidad de serlo se encuentra en nosotros mismos y la determinación hará que decidamos cómo queremos posicionarnos delante de las adversidades.
La paraula “Resiliència” la vaig descobrir, mentre vaig fer Integració Social. Parlaven de la capacitat dels éssers vius de poder-se refer de situacions traumàtiques. I em va semblar un concepte que tractem poc entre nosaltres. Crec que no es valora suficient aquesta capacitat, ja que, no és una tasca fàcil.
Més endavant vaig veure com aquest concepte encaixava en diferents àmbits. Com bé explica l’article, en l’àmbit laboral. És una aptitud molt atractiva per una persona que ha de liderar un grup de treballadores o treballadors. Òbviament és una capacitat molt vinculada a l’autoconeixement, a l’autoestima personal i la confiança sobre les seves capacitats.
Amb aquest article he pogut veure que a part de la capacitat de superació, és la capacitat per generar estratègies per a superar la situació “dolorosa”.
També m’ha semblat molt interessant la metàfora dels cignes negres i com a les persones quan se’ns canvia de paradigma entrem en bloqueig. I ens costa generar estratègies com la simple acceptació. Però aquesta solució que sembla tan senzilla, no ho és tan perquè partim de la incertesa i els humans no som bons plantant-li cara.
Justament per tot això, a mi la resiliència em sembla una capacitat psicològica molt lloable i que tots hauríem de treballar-nos per millorar-la. Ja que, ens permet encarar la vida malgrat que tinguem por o dubtes davant d’una situació.
Creo que es realmente importante potenciar nuestra resiliencia, aprendiendo de todo que aquello que nos va sucediendo y dándole un sentido y convirtiéndolo en aprendizaje. Por eso valoro tanto que en este artículo se muestren estrategias para trabajar en nuestra resiliencia. Al fin y al cabo, todos tenemos el potencial de ser personas resilientes, solo tenemos que trabajar en ello de manera consciente.
Siempre he sido partidario de que mentalizarse de que podemos, y me atrevería a decir que debemos, aprender de todo lo que sucede en nuestras vidas, nos predispone a superar obstáculos y ver los inconvenientes como desafíos. Creo que para desarrollar la resiliencia debemos, en primer lugar, cambiar la forma en que vemos las desgracias que pasan en nuestras vidas.
Ser conscientes de que todo ser humano puede llegar a ser como se proponga ser también es una herramienta clave. Concienciarse de que no somos incambiables, que si queremos ser amables, seremos amables. Lo que debemos asumir es que requiere tiempo y perseverancia. Muy buen artículo, el tema de la resiliencia necesita la atención que se merece.
Leer este comentario me sugiere que la resiliencia es una capacidad que todos/as podemos desarrollar y que puede implementarse en todos los campos de nuestra vida. Aquí diría que Hermínia lo centra en el plano laboral, pero creo que en el fondo la resiliencia hace referencia a la capacidad de resurgir emocionalmente cuando nuestra alma se siente dañada y nuestra esperanza hecha migas por el/los motivo/s que sea.
Al mismo tiempo, este artículo me ha hecho ampliar el significado de este concepto sobre el cual no había profundizado tanto hasta ahora, entendiéndolo como una invitación a soltar el control de las situaciones para aceptar la incertidumbre y aprender a gestionarla con las herramientas que tenemos.
Sin duda, me llevo recursos muy útiles e ideas sobre las que reflexionar, tales como: “A mayor frecuencia de un hecho menor sensibilidad frente a lo inesperado”, “seleccionamos únicamente aquellos hechos que encajan en nuestras teorías” y “sentirnos protagonistas de nuestra historia y no víctimas de las circunstancias”.
¡Gracias por la información!
Me ha gustado mucho el enfoque que ha hecho este artículo acerca de la resiliencia y de como la llevamos todos en nosotros. Creo que cuando nos encontramos en situaciones adversas o complicadas, la mayor parte de las veces tendemos a centrarnos en lo negativo y no vemos más allá pero conectar con esta capacidad de resiliencia nos ayudará a tomar otro punto de vista, a aprender incluso de las situaciones adversas y a afrontarlas con otra visión.
De este artículo me quedo con la metáfora del ave fénix, de cómo este resurge de las cenizas y de cómo nosotros podemos hacer de igual forma en nuestra vida y seguir transformándonos y creciendo incluso después de vivencias o circunstancias adversas.
Me parece súper importante darnos un espacio para reflexionar sobre la resiliencia. Partiendo de que las cosas difícilmente salen como esperamos, debemos trabajar la manera en que nos enfrentamos a ellas.
Aceptar que nos vamos a encontrar obstáculos en nuestra vida hará que nos enfrentemos a ellos de manera positiva y con más perspectiva. Considero que la resiliencia se manifiesta de manera distinta en cada persona y que se debe trabajar a lo largo de la vida.
He gaudit moltíssim aquesta lectura, vaig descobrir la resiliència vaig decidir fer el meu treball de segon de batxillerat en investigar-la i trobar persones resilients. A cada una de les entrevistes s’explicaven històries completament diferents, amb situacions molt adverses que tombarien a qualsevol, però totes elles els i les entrevistats/des acabaven somrient, amb el cap ben alt i sense voler que hagués passat de cap altra manera.
Llegint l’article he recordat a cada una d’aquelles persones i he pogut veure que totes elles reunien moltes de les característiques i valors que s’exposen, i sobretot la determinació de totes i cada una d’elles per aixecar-se i avançar. A la fórmula del Tom Peters per la resiliència li afegiria la perseverança, ja que també és important la capacitat d’aixecar-se les vegades que toqui per arribar allà on vols.
Me ha parecido un artículo muy interesante ya que muy pocas veces se da visibilidad y espacio de reflexión a estos temas y como futura psicóloga me parece excepcional poder plantearme y cuestionarme este tipo de cosas.
Considero que todo el mundo tiene la capacidad de ser resiliente pero si que considero que cada persona lo expresará o lo mostrará de una forma diferente. Ver los obstáculos como lecciones para aprender me parece muy interesante y una forma muy amorosa de aceptar y gestionar las dificultades que nos vamos encontrando por el camino.
Tomar consciencia y aprender a trabajar para desarrollar estas aptitudes me parece muy importante para cualquier proceso personal.
Creo que la resiliencia, de un modo u otro, no deja de ser algo subjetivo. Pero a la vez, creo que todos tenemos la capacidad de poder desarollarla y potenciarla. Cada persona, sabe hasta qué punto tiene la capacidad de adaptarse, de coger esa “forma física” en cualquier situación y creo que es muy importante, tal y como se puede observar desde el coaching teleológico el – para qué- ya que cuando tienes una finalidad y un objetivo, la capacidad de resiliencia tiene un significado y mucha más potencia para afrontar los distintos desafíos que pueden presentarse ante nosotros.
Muchas gracias Hermínia!
Este articulo me ha echo reflexionar sobre la conexión entre re-silencia y flexibilidad mental, la capacidad de aceptación de lo que en un momento determinado rompe nuestros esquemas mentales sobre la realidad el cisne negro, y por tanto la re-silencia es una capacidad que podemos entrenar.